Al momento de comprar una impresora nos encontramos una inmensa variedad de estas en el mercado, las más conocidas son las impresoras láser y de inyección de tinta.
En cuanto a las impresoras láser existen monocromáticas y de color.
Las monocromáticas son las más usadas principalmente por las empresas, debido a que son impresoras muy duraderas, tienen alta velocidad de impresión, calidad excepcional de impresión y durabilidad de las impresiones o copias, este último factor es el más tenido en cuenta, ya que las impresiones laser son resistentes a la humedad y al tiempo, debido a que la tinta en polvo se fusiona con el papel por medio de calor y presión; El costo por copia es bajo principalmente usando tóner de recarga. La desventaja es que imprimen solo blanco y negro.
Las impresoras Láser en color son rápidas y duraderas, sus impresiones son de calidad que perdura (no se decolora y es resistente al agua) sus desventajas son:
1. Al usar cuatro cartuchos de toner en lugar de uno, su tamaño es más grande y más costosa.
2. El costo por copia es alto en comparación a las impresoras de inyección de tinta con sistema continuó.
Impresoras de inyección de tinta: se distinguen dos tipos de tecnologías básicas
Impresoras de inyección térmica de tinta: este sistema aplica calor sobre la tinta, el calor hace que la tinta se evapore formando una burbuja que crece en volumen, produciendo un efecto cañón que empuja a la tinta hacia el exterior a través de las boquillas, la tinta es disparada hacia el papel, este proceso dura aproximadamente un microsegundo.
Impresoras de inyección de tinta desk-jet: esta tecnología se asemeja a la de un gotero, en el que aprovechando las características básicas de un cristal piezoeléctrico, se envían impulsos eléctricos al cristal y su deformación produce un bombeo de tinta hacia los conductos, disparando la tinta hacia el papel.